La piel: un órgano protector
- La piel protege de:
- Agresiones mecánicas (golpes y presiones),
- Agresiónes químicas,
- Rayos UV (gracias a la melanina),
- Agentes patógenos, gracias a las células inmunitarias de la dermis y la epidermis
- Regula la temperatura interna del cuerpo hasta los 37°C gracias a su función aislante, pero también gracias a la transpiración y al PIA (Parte Insensible de Agua , es decir, la evaporación del agua de la superficie de la piel), y asegura el equilibrio del agua y de las sales minerales.
- Capta los estímulos externos (tacto, presión, temperatura, dolor…) gracias a los diferentes receptores que se encuentran en de su superficie.
- Gracias a la exposición a los rayos UV del sol, sintetiza la vitamina D, que desempeña un papel esencial en el organismo, ya que permite que el calcio sea absorbido por el tracto digestivo y fijado en los huesos.